Hace unos días se procedió al traslado y posterior inhumación en el Rincón de la Memoria del cementerio municipal Nuestra Señora de la Soledad de los restos mortales de Antonio Ferrera Ríos, vecino de Cantillana asesinado en 1936 durante la Guerra Civil, y cuyos restos fueron encontrados en una fosa común en Alcalá del Río en los trabajos de exhumación realizados en 2019. 

El enterramiento se desarrolló en un ambiente íntimo y familiar por deseo expreso de sus descendientes, que estuvieron acompañados por Angelines García, alcaldesa de Cantillana y otros miembros del Ayuntamiento, así como representantes de la Asociación Comarcal Pro Memoria Democrática Vega Media del Guadalquivir. 

De la misma fosa común se recuperaron 14 cuerpos de los que sólo 4 han podido ser identificados a través de las pruebas de ADN.